El área de farmacotecnia, distribuye su trabajo en dos segmentos, uno de farmacotecnia no estéril y otro de farmacotecnia estéril. En el área de farmacotecnia no estéril, se realizan preparaciones galénicas, redosificaciones o reacondicionamiento de medicamentos que en muchas ocasiones no están disponibles en la industria farmacéutica en las presentaciones o dosis adecuadas. Así mismo, en esta área de preparan medicamentos en unidosis con toda la información de su envase original para ser dispensados a los pacientes hospitalizados.

En el área de farmacotecnia estéril, o también conocida como central de mezclas parenterales, se realizan preparaciones de medicamentos inyectables, oncológicos y nutriciones parenterales, bajo estrictos estándares de calidad que garanticen su correcta dosificación, inocuidad, seguridad y esterilidad necesarios para su administración.

El profesional farmacéutico hospitalario está involucrado en varios procesos transversales y forma parte de múltiples comités institucionales, aportando con sus conocimientos para el fortalecimiento de estos equipos de trabajo multidisciplinarios.

No menos importante, resulta el trabajo de investigación de los farmacéuticos, participando en ensayos clínicos, validación de protocolos, estudios farmacocinéticos, análisis de nuevas tecnologías sanitarias, etc.

Por todo esto, el servicio de farmacia hospitalaria se ha convertido hoy por hoy en un pilar fundamental para el sistema de salud, garantizando en todo momento el uso racional de los medicamentos con un enfoque centrado en el paciente.